El incremento de la presencia de IKEA en el mercado mexicano se da en un contexto en el que la pandemia ha causado problemas logísticos a muchas empresas a nivel local y mundial. De hecho, aun cuando la firma lanzó su sitio de comercio electrónico en otoño de 2020 en nuestro país a la fecha todavía muestra varios productos sin existencia.
Por cierto, la empresa Ikano Group, dueña de Ikano Industry –proveedor de IKEA–, construirá su primera fábrica en México, que estará financiada por HSBC con un “crédito verde” pues su construcción contará con la certificación LEED Gold por el grado de sustentabilidad que incorporará en sus diversos procesos: uso de energías renovables proveniente de paneles solares, utilización eficiente y manejo responsable del agua, reutilización de residuos en el proceso de producción y reciclaje, y jardines desérticos con vegetación endémica. Se construirá en Ramos Arizpe, Coahuila y producirá colchones y sofás para las tiendas que la cadena de muebles abra en Norteamérica. Se prevé que comience a operar en el segundo trimestre de 2021.
A Ikano Industry se sumará la empresa de origen español, Malasa Mex Contract, dedicada a la fabricación de mobiliario sobre diseño que, con una inversión de 286 millones de pesos, abrirá una fábrica en el Parque Industrial Bernardo Quintana ubicado en El Marqués, Querétaro. Cabe anotar que en México la fabricación de muebles representa el 3% del PIB nacional y que la oportunidad de abastecerlas con proveeduría nacional está más que latente.